Sergio Pérez ha asegurado que ya está todo hablado con Max Verstappen respecto a lo que pasó en Brasil, asegurando que seguirán trabajando como un gran equipo, aunque se lo quedarán de forma interna.
“Checo” destaca lo cerca que tuvo el podio, pero lo mal que le vino el coche de seguridad. Mientras Red Bull intenta buscar la razón de esa falta de ritmo, centrando su mente en Abu Dabi.
Mientras gran parte de la comunidad de la Fórmula 1 está enfadada con la actitud de Verstappen, la madre de Max, Sophie Kumpen, le a lanzado un dardo contra el mexicano sobre el terreno personal.
En una conversación en la que se acusa a Pérez de chocar a propósito en la clasificación de Mónaco, Sophie añade que “luego por la tarde le puso los cuernos a su mujer”, por los que ya pidió perdón. “Una mala fiesta, pero mi esposa y yo estamos más unidos que nunca”, explicó entonces.
“Esto quedó atrás y seguiremos trabajando como el gran equipo que hemos sido hasta ahora”, comentó el mexicano. “Estoy seguro de que si necesito ayuda en Abu Dabi, será diferente, y de cara al futuro, siempre vamos a poner al equipo primero”, ha agregado en la web de Red Bull.
Por: AYGG